En este espacio se recogen escritos, tanto en prosa como en verso, fotografías y contribuciones musicales de SEBASTIÁN TOLOSA CERNICHARO.
jueves, 26 de marzo de 2020
miércoles, 25 de marzo de 2020
CONTRIBUCIÓN AL ANIMO DE LOS COMPAÑEROS Y AMIGOS.
CONTRIBUCIÓN AL ÁNIMO DE LOS COMPAÑEROS Y AMIGOS.
Este es un trabajo que han realizado docentes del IES Blas de Prado de Camarena, Toledo
Me sumé porque vi que faltaba un poco de percusión aunque la pieza original carezca de ella. La cantante es la hija de una compañera de estudios, Carmen Fuentes.
El tema se llama "Tomorrow" del musical Annie. Una historia conmovedora. ¡Quédate en casa!
lunes, 23 de marzo de 2020
EL GEN MUSICAL.
EL GEN MUSICAL.
La música está presente en nuestras vidas, y una prueba de
ello es este momento crucial en que todos vamos navegando en un barco con el
rumbo incierto y cantamos emocionados "Resistiré" y otros temas
proclives a elevar el ánimo de la población y el nuestro propio. Los
componentes del Dúo Dinámico ni siquiera podrían imaginar que su canción se convirtiese en un himno contra la
tristeza y la impotencia, y a la vez en una efectiva medicina natural para el alma, y llegara a
cotas tan altas de reproducción en las redes sociales.
Con esto quiero resaltar que este arte forma parte de una actividad
humana que nos ha acompañado desde los tiempos del hombre primitivo en la caza, la pesca, el trabajo, las luchas, en el ocio, en
la crianza, en los ritos y celebraciones, en el hogar… y sin embargo, se encuentra dentro del currículo escolar con
una carga lectiva que roza la subsistencia.
La música es un ente etéreo que se lleva el viento y se
esparce en el volumen del espacio, pero queda en nuestra memoria y nos lleva a
relacionar momentos de nuestra existencia con melodías y ritmos que suenan o
que incluso nosotros creamos. Permite transportarnos en el tiempo y rememorar
eventos, cuando simplemente, unos cuantos acordes chocan con nuestros tímpanos.
Y además es un buen aliado que vive dentro
de los genes del homo sapiens y se ensalza en todas las esferas y situaciones
de la vida.
Éste es un buen momento para la reflexión y para iluminar
nuestro cerebro y ver lo importante que ha sido esta materia en la historia de
la humanidad y sigue siendo, tanto en el
proceder cotidiano hacia el bienestar, como en la travesía de los momentos más duros.
Sebastián Tolosa Cernicharo. Marzo de 2020.
sábado, 21 de marzo de 2020
LLAMANDO A LAS PUERTAS DEL CAMBIO. AÑO CERO.
LLAMANDO A LAS PUERTAS DEL CAMBIO.
Los sueños siguen vivos,
ahora que estamos a solas,
pensando en un futuro inmediato,
algo que se ve aún lejano.
Ganas de volver a la rutina,
como en los días de abundancia,
ahora el motivo es otro,
anhelando un soplo de esperanza.
El arte sale a flote,
la bondad surge y resalta,
el trabajo en bien del otro,
apaga egoismos y te ensalza.
Muchas cosas cambiarán,
volveremos al día a día,
con las luces apagadas,
y brotarán semillas que el fuego no abrasa.
Enseñanzas de la escuela de la vida,
que sin darnos cuenta nos regala,
el ser cautos, nobles y honrados,
desprendidos, sociables y solidarios.
Sebastián Tolosa Cernicharo.
Los sueños siguen vivos,
ahora que estamos a solas,
pensando en un futuro inmediato,
algo que se ve aún lejano.
Ganas de volver a la rutina,
como en los días de abundancia,
ahora el motivo es otro,
anhelando un soplo de esperanza.
El arte sale a flote,
la bondad surge y resalta,
el trabajo en bien del otro,
apaga egoismos y te ensalza.
Muchas cosas cambiarán,
volveremos al día a día,
con las luces apagadas,
y brotarán semillas que el fuego no abrasa.
Enseñanzas de la escuela de la vida,
que sin darnos cuenta nos regala,
el ser cautos, nobles y honrados,
desprendidos, sociables y solidarios.
Sebastián Tolosa Cernicharo.
Marzo de 2020.
Año cero.
Fue precisamente en la Nochevieja de 2019
cuando, inmersos en los faustos de la cena y celebración de año nuevo, no
sabíamos que teníamos a los pies una mecha de pólvora encendida. Alzábamos las
copas de espumoso ignorando lo que nos esperaría dos meses más tarde y
felicitábamos por doquier, deseando a los nuestros un feliz y próspero año
nuevo. En ello estamos, menos mal que hicimos los brindis y conjuros, si no
hubiese sido así, aún sería peor. Debemos seguir manteniendo esos anhelos para
el 2020, y estoy seguro de que lo lograremos y se cumplirán.
Un saludo de Sebastián Tolosa Cernicharo,
lunes, 16 de marzo de 2020
"DICHOSA EPIDEMIA 2020"
DICHOSA EPIDEMIA de 2020.
Ha habido muchas ocasiones en las que nos hemos acordado de
nuestros mayores cuando nos decían; “ahora
se vive muy bien, no sabéis lo que hemos pasado en nuestra niñez y juventud…”
Pues son aquellos que vivieron la
guerra o la posguerra española. Sobrevivieron
a la carencia sanitaria, pasaron calamidades de falta de higiene, exilios, emigraciones, colas y cartillas de
racionamiento, estraperlo, etc…
En los estudios de
Geografía e Historia de nuestra adolescencia y juventud hemos podido
leer el contenido de las guerras y grandes epidemias de peste o de cólera que siglos
atrás han esclarecido la población de
toda Europa, teniendo que replantearse como consecuencia, cambios de estilos
de vida y adaptarse a nuevas
situaciones.
En nuestros últimos siglos, la triquinosis, el aceite de colza, la Marcha
Verde, el intento de golpe de estado, la Guerra del Golfo, el terrorismo, las mareas migratorias, el sida, el
ébola, las vacas locas, los pepinos
contaminados, las gripes, entre ellas la del pollo, la crisis de 2009 y algún otro hecho que se
me habrá quedado en el tintero, todos ellos
nos ponían sobre aviso de la
posibilidad de poner en peligro la vida cotidiana y el bienestar de las
personas o caer bajo los efectos de una posible
pandemia global que nos podía
cambiar la vida. Así ahora, con este virus coronado, parece que estamos encaminados temporalmente al aislamiento para ver si se
recuperan los casos y volvemos poco a poco a la normalidad, pero cada uno
tendrá que hacer su esfuerzo para lograr el éxito comunitario como ha ocurrido
en otras etapas de la historia.
Hay posibles explicaciones de esta nueva epidemia, y puede
ser que, a raíz de que en ciertos países
existen mercados de animales vivos y se consumen ciertas especies como el
murciélago, que según las circunstancias o condiciones de cocinado y
preparación culinaria y de higiene, pueden provocar enfermedades en el ser
humano, que pueden extenderse como la
pólvora al mundo entero. O bien, por investigaciones, quizás en laboratorios
clandestinos o no, indagando y ensayando pruebas con virus y bacterias desconocidas y encima sin
seguir los estrictos protocolos de aislamiento. Y escapan de las probetas, intencionadamente
o por accidente, y se van de las manos, y que al extenderse pueden ser letales
para la población. Al igual que en las innumerables películas en las que por entretenimiento,
después de verlas, han hecho que estas calamidades y temores se nos pasasen por
la cabeza creyendo que era un sueño o mera ficción y ahora nos despertamos cada
día viendo que la cosa va en serio, y nosotros somos los protagonistas. En todo caso hay que confiar en que todo vaya bien. Todo irá bien.
Marzo de 2020. Sebastián Tolosa Cernicharo.
PRIMO MIGUEL LINARES CASTELLOTE
EL PRIMO MIGUEL LINARES CASTELLOTE.
Miguel Linares Castellote, un hombre particular. Conocido en el pueblo por ser el que lanzaba los cohetes en las procesiones del Cristo de la Salud, tan venerado en Casas Ibáñez. Rodeado de monaguillos vestidos con la camisola de puntillas hechas con aguja de ganchillo, encabezaba la procesión del Cristo. Los críos alzábamos la vista siguiendo la trayectoria del cohete para después de la explosión, ver donde caía la varilla y correr a recogerla. El olor a pólvora nos acompañaba todo el trayecto. Yo sabía que era mi primo, pero no le decía nada, yo era uno más de la cuadrilla. Y no quería ser el niño de confianza que llevara el manojo de cohetes y preparárselos uno a uno para irlos colocando en la tablilla metiéndonos por el cáncamo que hacía de guía. La pólvora me daba bastante respeto y él iba, bien fumando o llevaba continuamente una mecha encendida para pegarle al cohete con la colilla que llevaba en danza o la propia mecha.
Yo lo conocía sobretodo de verlo en las "matanzas" de mi tía Isabel, prima hermana de Miguel, donde se reunía gran parte de mi familia materna para colaborar y pasar dos días de trabajo y de alegría. Pues se comía, se bebía, se conversaba y se comentaban las alcahueterías del pueblo, los embarazos de las adolescentes y los cuernos y líos de cama de algunos matrimonios. Los críos estábamos para hacer los recados pero también estábamos al calor de la lumbre oyendo todo lo que allí se decía, incluidos los chistes verdes que se repetía año tras año. Miguel era soltero, y en aquellos tiempos tuvo que salir a Suiza a trabajar como albañil regresando a temporadas para arreglar las cuatro cepas que tenía. Iba siempre montado en su bicicleta de cuadro, bastante vieja y oxidada, por cierto. Era un gran conversador, sabía mucho de política internacional, pues había vivido a la vez en un país democrático como Suiza y en España en plena dictadura. En los bares, lugares que frecuentaba con asiduidad, siempre tenía gente con quien hablar. Tuvo varios oficios, agricultor, ayudante en las cocinas del restaurante Las Vegas, en la empresa de frío industrial de Torrente y si no me equivoco, también quizás fue correachero como su hermano Pepe, porque recuerdo ver en una habitación botes con remaches y herramientas como martillo, remachadora, punzones y agujas para coser en cuero, hilo “tilaor”, así como trozos de diversas formas y tamaños y tiras de cuero. Tenía otros tres hermanos, Jaime que trabajaba en Maestranza aérea de Albacete, Fernando que era mecánico. Alguno de ellos tenía un lunar en la barbilla (mi hermano tiene uno en el mismo lugar) y Juan que estuvo en la División Azul.
Era cliente fijo de la panadería de mis padres, (mi madre Purificación era su prima hermana), siempre se llevaba un pan de kilo que se colocaba debajo del brazo y escondido dentro de la ligerilla chaqueta gris que le acompañaba en el invierno. Vivía con su madre, la María de Chuano, viuda de marido y huérfila por perder a su hijo Juan en la División Azul. Juan era un ingeniero inteligente, funcionario que trabajaba en el edificio de la Sindical de las “casas baratas”. Según parece, tras la contienda española de la Guerra Civil Española, el general Franco, quiso colaborar con Hitler y envió soldados contra Rusia en el frente de Leningrado en la Segunda Guerra Mundial. Juan fue uno de los que medio en broma, medio en serio, fue convencido por los amigos y se vio apuntado en las listas. Algo que para mi tía María fue un suplicio de lloros y de tormento. El día que partió no podía despegarse del camión que llevaba a su hijo al frente. Al poco tiempo vino un mando militar llamando a su puerta comunicándole que su hijo había muerto en acto de servicio intentando salvar a otro compañero. La actual Plaza de España era la plaza dedicada a Juan Linares Castellote, que así se llamaba en el callejero local. Aparecía en la lista de caídos por Dios y por España en la losa de mármol que figuraba en la pared de la iglesia parroquial. Su tumba es la del Soldado Juan Linares Castellote de la 2ª Compañía del Grupo de Exploración. Fallecido el 14 de julio de 1.942. Enterrado en Konigsberg, fosa 311. Su madre recibió la medalla de la División Azul y se la colocó en el manto a la Virgen de la Cabeza.
Al morir su madre, mi primo Miguel quedó solo y con una vida solitaria trabajando en lo que podía y en el campo. El abandono era tal, que su jefe y amigo Torrente quiso hacerle un cuarto de aseo en su casa a lo que se negaba, y hasta los servicios sociales intentaron meterlo en la residencia de ancianos. Había sido siempre un ser muy libre y no aguantó allí mucho tiempo y volvió a su guarida. Un día, lo echaron de menos en sus compras habituales de los comercios, y al buscarlo lo encontraron muerto en casa junto a su cocinilla de lumbre cuando estaría asando en las ascuas, sobre una parrilla, unas sardinas para cenar. La casa donde vivía era moderna para la época. Una casa estrecha con una gran entradita que sería la salita de estar y luego un pasillo que daba al corral y a una estancia mayor con la cocina de chimenea. En el medio había una escalera con baranda de madera que subía a la primera planta donde estaban los dormitorios, contaba con tres o cuatro habitaciones con camas de madera y somieres de alambre tensado. Cuando falleció tenía la entrada de la casa llena de cepas secas para usarlas como leña y ante la duda de velarlo allí en esa estancia, porque la casa ya estaba deteriorada y con falta de orden, mi tío Blas decidió llevarse el ataúd a su casa y hacer el velatorio de su primo hermano de una manera más digna.
El día de su sepelio, comentaba el párroco de la localidad que era un entierro no correspondido, pues estuvimos muy pocos, no llegaba a cincuenta personas. Miguel era religioso practicante y siempre ocupaba el mismo lugar en la iglesia para oír misa, El cura encendió una vela en el lugar que normalmente permanecía de pie, a modo de recuerdo y de agradecimiento a sus servicios como buen cristiano.
Sebastián Tolosa Cernicharo marzo de 2020.
jueves, 12 de marzo de 2020
EL ALCANTARILLADO EN CASAS IBÁÑEZ.
EL ALCANTARILLADO EN CASAS IBÁÑEZ.
Seguro estoy de que hay documentos oficiales que demuestran a pies juntillas lo que intento explicar en esta entrada. Una pequeña historia del alcantarillado en Casas Ibáñez. Existían los basureros en las casas, donde se tiraban los residuos de la comida que a su vez servían de alimento a los animales de la casa, las gallinas y los conejos generalmente. pero el aumento de población exigió mayor higiene y hubo que hacer obras de saneamiento para evitar epidemias y enfermedades.
Es un pensamiento que me surgió debido a mi costumbre de leer
lo que pone en las tapas de
alcantarilla. Sería más fácil documentar esta idea yendo al Ayuntamiento donde
seguro que hay datos más que suficientes para ello, pero es más divertido el
aprendizaje por descubrimiento y es
susceptible de contraste con lo que ya está escrito.
Parece ser que nuestra localidad
no tuvo alcantarillado propiamente dicho hasta los años 60, en las calles sin asfaltar, había unas conducciones a la vista a modo de regueros que iban a parar a la vía central de La
Cañada que era la que recogía las aguas de lluvia y fecales, ya en las afueras de Casas Ibáñez por una alcantarilla paralela a la carretera Nacional 322 hacia una estación
primitiva depuradora o más bien de
filtrado que devolvía las aguas
“limpias” a la Cañada de Vallunquer, ya
en el límite con Alborea, para seguir su curso pasando por la Cañada de esta
localidad y después por La Pasadilla de Casas de Ves, hasta llegar al
río Cabriel.
Basándome en la actual
localización de las tapas de alcantarilla he podido deducir, y seguramente con
algún margen de error y de detalles, las diferentes obras realizadas sobre el
temas de saneamiento en el municipio.
Las primeras actuaciones de
alcantarillado, o de por lo menos alguna conducción que traspasase las
carreteras que surcan la localidad de Casas Ibáñez, estarían en
torno a ellas, y solían realizarse con tapaderas de hormigón que se
elaboraban a pie de obra como la que aparece más abajo.


Aunque
una primera aproximación a gran escala en cuanto a saneamiento estuvo allá por
el año 1961 que es el que aparece grabado como “DISTRIBUCIÓN AGUAS CASAS IBÁÑEZ 1961”en las tapas metálicas de hierro fundido. Estas
primeras, las podemos encontrar en algunas de las calles más céntricas e
importantes del pueblo como la calle de la Tercia, la calle Pascual Faura,
calle Charco, calle San Jorge, etc… y las Casas Baratas, respetando en
ocasiones la distribución en forma
radial partiendo del punto central de La Plaza de La Constitución.
Tapa de alcantarilla hecha a pie de obra a base de hormigón.
Tienen forma circular, con un
dibujo geométrico a modo de círculos
concéntricos como las dianas, y unas diagonales asemejándose a un punto de mira,
y con la inscripción correspondiente a la localidad y fecha de actuación.
Aunque también existen las que no tienen ninguna inscripción referente al
ayuntamiento o al año, debido seguramente al coste de impresión de esos datos
por ser parte de un pedido reducido o por tratarse de obras de poca
envergadura de manera que encargaban a
la fábrica las tapas que se necesitaban y punto.
También hay que
apuntar, que se debe tener en cuenta que su localización ha variado debido a las obras posteriores que
ha habido que acometer por
asfaltado u otras casusas, y las tapas
pueden haberse cambiado de lugar durante las mismas. De hecho puede aparecer
alguna de ellas en barrios nuevos, por haber hecho falta tapar la alcantarilla y estar disponibles en ese
momento en los almacenes municipales.
Una segunda actuación importante
en alcantarillado y saneamiento en Casas Ibáñez que muestran el texto
“SANEAMIENTO CASAS IBÁÑEZ 1965” que tuvo
lugar en el año 1965. Aquí se amplió a casi todo el conjunto de calles de Casas
Ibáñez, que quedaba rodeando la plaza de La Constitución, La Cañada, barrio de
la Santa y barrios de la Calle Charco y Frontón. Debido al gran número de tapaderas de alcantarilla con la fecha 1965 que hay diseminadas en toda la localidad, la quinta
de niños y niñas que nació en este año, que hoy ya pasan de la edad de 50 años, ha sido denominada de forma graciosa “La
quinta de La Alcantarilla” con motivo de su celebración cincuentañera en la
feria de 2015.
En el año 1970 también hubo otra
actuación en este ámbito que abordó según los indicios y la localización, la
periferia de la localidad, como la calle del Camino de la Vía (Baeza- Utiel), y
la Calle San Juan o Calle Motor. Hay una errata en la inscripción de estas
tapaderas, “ALCATARILLADO DE CASAS IBÁÑEZ
AÑO 1970”, faltando una N.
En el año 1982 hubo otra obra de alcantarillado que
abarcaba especialmente la zona aledaña a la Plaza de Toros
Ha habido otras actuaciones sin
fecha, tanto de aguas potables, bocas de riego y registros, como de aguas
fecales, realizadas por empresas que han puesto sus propias tapaderas, pero sin
nada escrito referente al ayuntamiento, ni fechas, solamente con los logotipos
de las empresas que las fabrican, como
la Fundició Ductil Benito, F. Fernández M. de Río Seco, Fábregas (Igualada), López
Iniesta (Murcia), Inmasa (Albacete), Valsu, Gascó (Valencia) e incluso
tapaderas de otros pueblos cercanos y no tan cercanos como Macastre (Valencia),
La Portera de Requena (Valencia), Alboraya (Valencia), Higueruela, Mogente (Valencia), la vecina Villamalea e incluso Albacete capital.
A partir de este punto hay tal variedad de tapaderas de alcantarilla que rara es la vez que salgo a pasear y encuentro algún diseño nuevo. Además incluyo tapas de boca de riego, tapas de llaves de paso, todo relacionado con el agua y el alcantarillado.
Hay otras tapaderas en forma cuadrada e incluso redonda, pero estas serán objeto de
otro estudio. Se trata de otras obras o instalaciones relacionadas con la telefonía o la
electricidad de nuestra localidad.
Sebastián Tolosa Cernicharo, marzo de 2020.
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